El día del historiador

Escrito por: Prof. Ian Alonso Esquivel López

La historia es necesaria, no sólo para hacer agradable

la vida, sino también para conferir a ésta un sentido

moral. Lo que es en sí mortal, a través de la historia

conquista la inmortalidad; lo que se haya ausente

deviene presente; lo viejo se rejuvenece.

Enrique Florescano

Heródoto de Halicarnaso considerado por muchos como el padre de la Historia, dedicó una parte de su vida a reconstruir y recordar parte de lo que le tocó vivir “Las guerras médicas”, en su andar recorrió varios lugares icónicos del mundo antiguo y recopiló impresiones y testimonios de los pobladores, siendo su libro Historias el primero con una metodología clara y un cierto rigor al momento de escribir, aunque para muchos puristas de las ciencias sociales le faltó mayor severidad, pero, lo interesante fue que a partir de ese momento la labor de estudiar, describir, analizar y contar lo sucedido en la época vivida fue importante, el humano comenzaría a generar interrogantes sobre su pasado y  ¿Cómo serían recordados?.

El historiador se convirtió en una figura que detrás de una mesa repleta de documentos movía los hilos de una reino, imperio o gobierno, sustentando o deponiendo a las figuras de autoridad, se convierte en el creador de épocas, de poemas pletóricos, de odas a la guerra o de sinfonías a la paz, cosas sustentadas por horas y días de investigación, guerras, muertes, tratados, pandemias, suturadas con la pluma y el papel, escritos que dan vida, muchas veces de otro tiempo que no se puede alcanzar, pero que las letras vuelven empático al lector con nuestros antepasados, entonces ya no sólo son conflictos, también hay bailes, danzas, conciertos, justas, reuniones en el ágora, en el coliseo, en una cancha de juego de pelota, se sueña con un mundo mejor, se escribe desde un pasado glorioso hasta un acontecimiento penoso.

La Historia es el libro de los hechos, no de los intentos, el historiador es un detective, un espía, un vigía, un artífice de letras atemporal, un creador, un representante de realidades e interpretaciones, el historiador representa un vínculo que nos une con todo lo que imaginamos ser, o con lo que no queremos convertirnos, dándole un sentido al espejo del presente que refleja muchas vidas de trabajo, lucha y libertad.

Así en este contexto se celebra el 12 de septiembre como día del historiador, fecha alusiva a la fundación de la academia mexicana de la Historia allá en el año de 1919, otorgándole un lugar a al que conoce de primera mano cómo han sucedido los hechos, para poder analizarlos y obtener conclusiones útiles a las nuevas generaciones. Sigamos generando historias y no perdamos la costumbre de leer de nuestro pasado para analizar el presente.